top of page

DEL MINI BASKET A PROFESIONAL

El título del artículo parecería hablar de la carrera de un jugador. pero no. mi idea es hablar de la carrera de entrenador.no puedo dar por sentado ni dejar establecidas pautas para nadie, por lo que sólo tengo autoridad para hacerlo en base a mi propia experiencia.
Hoy en día todos queremos ser como Hernández, Magnano, Lamas, Tolcachier, García, etc. pero ellos son solo el 1 o 2 % de la cantidad total de entrenadores, (de distintos niveles y ligas), que trabajamos en basket en la República Argentina.
podemos deducir que lo que les sucede en cuanto a reconocimiento y resultado deportivo, no es lo "normal", sino lo extraordinario.
La realidad es que somos cientos de entrenadores en distintos lugares en busca de "un sueño", que, por suerte, en nuestro país es palpable, y es "dirigir en Liga Nacional" en alguno de sus estamentos. y eso no nos lo quita nadie. Aún sabiendo que posiblemente no vayamos a ser uno de los nombrados, ni a obtener sus increíbles logros.
Pero podemos sacar nuestra mejor versión como entrenador si trabajamos duro cada día. Y eso es muy satisfactorio también
Los más experimentados nos han transmitido en clínicas y cursos, que nuestra carrera esta plagada de contratiempos, dificultades, poco reconocimiento, muchas derrotas y que los resultados, no siempre van a ir de la mano de ese esfuerzo que debemos pasar año tras año, temporada tras temporada.
Lo que sí queda claro, es que podemos planificar nuestra carrera tratando de no quemar etapas, pisar sobre terreno firme. Como me dijo una vez Sergio Hernández: "prepararse "para cuando" te llegue la oportunidad y no "cuando" te llegue la oportunidad".
Equilibrio mental, cuidado físico,  psicología,  idiomas, manejo de tecnología  estudiar diariamente, leer, (no solo básket), nos va a hacer mejor persona y por ende, seguramente mejor entrenador al momento que lo necesitemos.
es probable que los escalones que queramos alcanzar sean mas accesibles si lo hacemos de esta manera. las oportunidades llegan si uno las busca, pero en ese momento hay que estar preparado para el nivel que la oportunidad demande de parte del entrenador.
En mi caso, al no haber sido jugador, creí que esta regla era indispensable para mi desarrollo. La etapa de minibásket debe ser la que nos inicie pedagógica y técnicamente de manera indefectible. Son bases que nos acompañan hasta la etapa profesional y no se deben pasar por alto, según mi opinión.
El manejo de grupo, los ensayos-errores que podemos cometer al dirigir minibásket no tienen tiempo de ser experimentados una vez que trabajamos con profesionales.  Por el contrario, tenemos la posibilidad de hacerlo sin presiones en esta etapa.
Claro, es difícil para un entrenador joven entender que esta etapa necesita de mucha dedicación, pasión y esfuerzo, cuando en realidad el reconocimiento es poco. No existen títulos, fotos, notas, ni autógrafos para un entrenador de mini básket. Pero la sensación de seguridad y crecimiento que se empieza a experimentar es tan reconfortante como un buen resultado de liga. Aún cuando también la remuneración económica tampoco es acorde al esfuerzo.
Pero esta profesión necesita de una apuesta que no siempre va a tener relación directa con lo económico,  al menos, no a corto plazo. Es la etapa de sembrar para cosechar a futuro.
Después de una buena etapa inicial como entrenador de mini básket (con la misma pasión que si dirigiéramos Liga Nacional), es indefectible que empecemos a incorporar manejo de tácticas y grupos que se acerquen a un equipo de mayores.
La etapa de las categorías formativas nos pone a prueba tanto nuestros conocimientos como nuestro  liderazgo de grupo. Aquel que ha logrado dirigir satisfactoriamente buenos equipos de categorías formativas superiores (U17, U19), sabe que puede hacer un trabajo muy similar desde lo profesional a lo que mas tarde realizará con equipos de mayores.
la Liga Nacional en sus 3 niveles (A, TNA y Federal), es muy tentadora, en todo sentido. Es el sueño que perseguimos, normalmente desde que nos iniciamos. y cuanto más alto el nivel, pareciera ser que mayor satisfacción nos va a brindar.
Pero es muy importante conocer las estructuras de las distintas competencias, (ligas locales, regionales y torneos provinciales), para poder disfrutar aún más del profesionalismo cuando nos llegue la oportunidad. Por eso agradezco haber podido dirigir también todas estas categorias que me permitieron aprender a hacer mucho con poco
Hoy puedo decir que las últimas 3 temporadas, pasadas entre el Torneo Federal y el TNA, las he disfrutado en plenitud, gracias a las experiencias y formación de cada uno de los niveles anteriores.
La formación nunca termina, los objetivos nunca se dejan de alcanzar y replantear. Esta hermosa carrera que tenemos es, por suerte, todo lo larga y gratificante que queramos que sea, pero la siembra-cosecha es permanente y sólo depende de nosotros y nuestro "cuidadoso plan".
Éxitos para todos aquellos que estén desandando este camino con honestidad y sacrificio, de todo corazón.
​

Marcelo Macias
Asistente de Banda Norte temporada 12-13 TNA



 

bottom of page